sábado, 9 de julio de 2016

Perfiles de la Iglesia según Hans Urs von Balthasar


Perfiles de la Iglesia

Tomando como base el desarrollo de la experiencia de la Iglesia primitiva, von Balthasar habla de cinco principios que constituyen la estructura fundamental de la Iglesia: el principio petrino, el principio paulino, el principio joánico, el principio jacobeo y el principio mariano que los abarca a todos.

El principio petrino es el más conocido: trae a la mente la figura de Pedro. A partir de la lectura del evangelio, de los Hechos de los Apóstoles y de las cartas de Pedro, von Balthasar señala la figura de Pedro relacionándola con la proclamación del kerigma y con su realización concreta en la vida cristiana. La continuación de la misión de Pedro tiene que ver con el Credo predicado de manera ordenada en todo el mundo, a través del ministerio pastoral.

El principio paulino está vinculado al carácter misionero de Pablo, el apóstol de los gentiles, el que se convirtió en cristiano por pura gracia, sin méritos ni obras, rompiendo irremediablemente con el pasado. Podemos ver como continúa la misión de Pablo en la irrupción desde lo alto, imprevista y siempre nueva, de nuevos carismas en la historia de la Iglesia. Es un principio profético y celeste, en el que están implicados los grandes carismas misioneros, las grandes conversiones, las grandes visiones derramadas sobre la Iglesia a través de palabras dictadas por el Espíritu. Se pone el acento en la extensión y en la estructura vertical de la Iglesia. Los grandes carismas derivan de la Jerusalén celeste y se da testimonio de ellos con las palabras y con la vida. Sobre esta base se pone de manifiesto la libertad en el Espíritu Santo, si bien la sumisión a Pedro es signo de la autenticidad de las misiones. La tradición paulina infunde en la Iglesia la visión y la certeza de la salvación a través de su dimensión carismática.

El principio joánico es aquel en el que von Balthasar ve reflejada gran parte de su obra. Juan es el discípulo predilecto, el evangelista del mandamiento nuevo. Von Balthasar considera la misión de Juan como una misión de unidad que continúa. Sintetiza los elementos petrinos y paulinos combinándolos con una visión contemplativa. Encarnan esta dimensión de la Iglesia todos los que viven los consejos evangélicos y tienen por misión el amor contemplativo: comunican el mensaje de que con el amor todo es posible.

El principio jacobeo se basa en Santiago, hermano del Señor, que parece haber ocupado el lugar de Pedro cuando éste dejó Jerusalén (Hch 12, 17). En el Concilio de los apóstoles fue el promotor de la moción decisiva para la reconciliación entre cristianos judíos y gentiles (Hch 15, 13-21). Pero representa sobre todo la continuidad entre la Antigua Alianza y la Nueva, representa a la Tradición, la legitimación de la letra de la ley contra un puro espiritualismo. Es la dimensión de la Iglesia que afirma el sentido histórico de las cosas, la continuidad, la Tradición, el derecho canónico. Este principio está personificado en aquellos que tienen la misión de recordarnos que es necesario estar anclados en la experiencia primera y que es importante volver a los orígenes de nuestra historia cristiana para encontrar nueva luz que nos permita seguir adelante.

El principio mariano afirma que María es el modelo de la fe para todos los miembros de la Iglesia.
Los fundamentos de este principio se apoyan en la lógica trinitaria que nos manifiesta el inefable misterio de Dios que se nos ha revelado en Cristo. “Él nos ha dado a conocer sus planes más secretos, los que había decidido realizar en Cristo” (Ef 1, 9), lo que “había decidido realizar en la plenitud de los tiempos”, que no es otra cosa que “recapitular en Cristo todas las cosas, las del cielo y las de la tierra” (Ef  l,10). En los escritos de von Balthasar, María es una explicación de este misterio de amor y es el modelo de nuestro encuentro con el misterio de Dios revelado en Jesucristo.

Jesús, en su vida, se rodeó de una “constelación” humana compuesta por María, por Pedro, por los apóstoles, por las hermanas de Betania, etc. Todos representan las distintas misiones de la Iglesia, que se perpetúan en su camino histórico.

“Pedro, en la comunidad pascual y pentecostal, reconocería, como los demás apóstoles, a María como la madre del Señor por su docilidad a la gracia y a su respuesta a la voluntad de Dios. Mientras María, acompañando a la Iglesia naciente, vería en Pedro al discípulo a quien su hijo dio las llaves del Reino de los cielos. Para María Pedro es el punto de referencia, en quien “hacer unidad” hasta el final. Para Pedro, en cambio, la referencia es María, porque ella además de Madre, es el “deber ser” de toda la Iglesia. Y ninguno de los dos se equivocan”1.

La característica que aporta María es que Ella es “prototipo” de la Iglesia, “modelo” suyo, desde el comienzo de su misión, es decir, desde el acontecimiento de la Anunciación. “María precede a todos los demás y, obviamente, al mismo Pedro y a los apóstoles”2. “El perfil mariano es anterior al petrino  … y es más alto y preeminente, más rico en implicaciones personales y comunitarias”3. El principio mariano es, en distintos aspectos, más fundamental que el principio petrino. De hecho el principio mariano antecede al petrino. Esto significa que ser creyente es más importante que desempeñar un ministerio en la Iglesia.

Esta novedad mariológica está fundamentada en la doctrina del Concilio Vaticano II y es uno de los aportes más significativos para la renovación de la Iglesia. En el documento conciliar Lumen Gentium, la Iglesia, a través de la voz de los padres conciliares, “se propone declarar con mayor precisión a sus fieles y a todo el mundo su naturaleza y su misión”. En dicho documento se describe a la Iglesia como “Pueblo de Dios” (9) o “muchedumbre reunida en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo” (4). En el capítulo VIII del mismo documento, dedicado íntegramente a María, se proclama a María “miembro sobreeminente y del todo singular”(53), “prototipo y modelo destacadísimo en la fe y caridad” (53) de esa muchedumbre de creyentes que constituye la Iglesia.

Cuando el capítulo VIII de la Lumen Gentium afirma que María es “prototipo” y “modelo” de la Iglesia significa que ella es el modelo de cada uno de los miembros que constituyen la “muchedumbre de creyentes”. El “sí” de María a Dios es el acto de amor perfecto que la humanidad ya ha dado a Dios. La vida de la Iglesia continúa y actualiza el "sí" de María a Dios, y “se manifiesta sobre todo en la santidad del amor y en la vida evangélica del creyente”4. Para la cristiandad el encuentro con el Misterio del amor implica la conversión al amor.

La explicación de la estructura organizativa de la Iglesia se describe mediante el principio petrino que fundamenta la unidad institucional. La relación de Pedro con Jesús en los inicios de la comunidad eclesial, en la fundación de la Iglesia, pone de manifiesto el deseo de Jesús de que Pedro sea quien presida en la caridad y sea el centro de la unión de todos.

“El perfil petrino lo viven hoy el Papa y todo el colegio apostólico, con la ayuda de los presbíteros y de los diáconos, dóciles a la acción del Espíritu, que dirige a través de ellos la nave de la Iglesia” 5.

La explicación de la esencia de la Iglesia destaca el principio mariano que describe los fundamentos en los que se apoya la santidad de la Iglesia.

El perfil mariano, lo viven todos los fieles, todos los carismas, todos los profetas, todo el amor que se derrama en el mundo cuando se vive la Palabra, sin recortes ni compromisos, y cuando se deja actuar al Espíritu para que mueva los corazones de los fieles. No son dos polos en tensión, dos aspectos a equilibrar, o dos realidades dialécticas. No, son dos rostros concretos, que se quieren, que se sirven, que se necesitan, y que se miran en la única mirada del Señor, que ha dado la vida por ellos, y por quien también ellos están dispuestos a dar la vida. El mundo intenta arrancárselos a la Iglesia, para que sea una estructura de poder más, sin María; o para que sea una corriente de entusiasmo a la deriva, sin Pedro. Pero ninguno de los dos faltarán jamás”6.

La relación de María con Jesús en los inicios de la comunidad pone de manifiesto que María realiza el acto de comunión más perfecto con los planes de Jesús al aceptar hacer su voluntad. El “sí” de María constituye una Alianza. Este es el motivo por el que podemos hablar de “rostro mariano” refiriéndonos a los carismas y a la santidad de la Iglesia.


Las resonancias que tiene en la vida de la Iglesia la función de María así comprendida son numerosas: ella es el modelo para la vida del cristiano; es el prototipo que puede contemplar la mujer para encontrar el lugar que le corresponde en la Iglesia; es el “estilo” de los movimiento eclesiales. María es, además, el camino que conduce al ecumenismo y al diálogo interreligioso, es la que puede hacer que el cristianismo supere el riesgo imperceptible de volverse inhumano y que la Iglesia supere el riesgo de volverse funcionalista, sin alma.

miércoles, 29 de junio de 2016

BIODANZA









¿Qué es la Biodanza?

Biodanza o danza de la vida, consiste en una serie de ejercicios de movimiento, relajación y voz, escuchando una música específica.
A través de la música, el movimiento y la interacción con el otro, la Biodanza facilita la expresión y el poder transmitir lo que llevamos dentro, haciendo a la vez ejercicio. Todo esto hace que cualquier persona la pueda practicar, independientemente de la edad o estado físico.
Al poder exteriorizar lo que llevamos dentro, sin utilizar para ello la palabra, conseguimos armonizar cuerpo, mente, emociones y sentimientos.Con su práctica conseguimos la integración de lo que pensamos, sentimos y hacemos, para evitar que pensemos una cosa, sintamos otra y hagamos la contraria.
No olvidemos que muchas personas viven en un medio tóxico que imposibilita la expresión de su potencial afectivo y creativo y que pensar y sentir una cosa y hacer otra diferente, no es coherencia, y la incoherencia y la falta de autenticidad a la larga crean problemas de salud.
Biodanza utiliza una serie de ejercicios estimulados por la música, que trabajan las cinco líneas básicas de expresión del ser humano que son la vitalidad, la sensualidad, la creatividad, la afectividad y la trascendencia.

¿En qué nos puede ayudar?

En general fomenta la salud y el desarrollo armonioso de la personalidad.
Hace a las personas más saludables, más fuertes, más equilibradas, capaces de enfrentarse con gran entereza a las circunstancias y vicisitudes, mejorando con ello la calidad de vida.
En lo que respecta al estado psicológico y emocional su práctica hace que las personas se sientan más vitales, creativas y capaces de disfrutar intensamente de la vida, permitiendo que las personas se sientan reconocidas, aceptadas y queridas por ellas mismas, es decir por lo que son, no por lo que hacen, ni por lo que tienen, se encuentren a si mismas y se reconozcan a través de los demás, facilitando el vivir en armonía.
Y en lo referente al estado físico actúa como una gimnasia de mantenimiento, con la ventaja de hacer ejercicio físico sin esfuerzo y casi sin darse cuenta.
La música tienen mucho que ver en ello, ya que ésta aumenta y potencia la fuerza y resistencia frente al ejercicio a nivel físico y eleva el estado anímico a nivel mental.

Beneficios

  • Nos ayuda a descubrir y desarrollar nuestros potenciales.
  • Hace desaparecer paulatinamente tensiones, estrés y dolores.
  • Superación de estados de carencia afectivo-emocional.
  • Reducción del pensamiento compulsivo-negativo.
  • Fomenta y mejora la expresión y comunicación.
  • Favorece la conexión con la vida en toda su plenitud, en el aquí y el ahora.
  • Ayuda al reencuentro consigo mismo y con los demás.
  • Alienta el instinto lúdico, y el goce y disfrute de la vida.

¿En qué se basa?

Se basa en musicoterapia y movimiento trabajando al unísono. La música, facilita su realización ya que toda música es inspiradora y produce o hace que sientas algo.
Toda persona se beneficia desde el primer día, ya que no es nada estudiado ni que necesite ser aprendido, utiliza la espontaneidad, lo instintivo, lo natural, basándose simplemente en lo que la música te inspira y te produce. Tú sencillamente lo manifiestas con tu cuerpo, con el movimiento, los gestos y la expresión.

Origen e historia

Fue creada por Rolando Toro, antropólogo y psicólogo chileno, en los años 60, el cual elaboró experiencias clínicas con pacientes psiquiátricos para comprobar las vivencias que la música puede estimular en las personas. Llegó a la conclusión que la música tiene un poder curativo capaz de modificar estados físicos y emocionales crónicos.
La investigación se desarrolló a lo largo de 25 años de confrontación con la realidad, hasta llegar a la elaboración de un modelo teórico científico.
Actualmente la Biodanza está instaurada en multitud de países. En España se conoce desde hace aproximadamente unos 40 años.

En resumen el objetivo de la Biodanza es que cada persona sea responsable de su propio crecimiento personal, que pueda motivarse y crear nuevos alicientes para vivir y en particular mantener un estilo de vida centrado en la salud y el bienestar con todos los beneficios que ello comporta.

mandalas


¿Qué es un Mandala?

El mandala, palabra sánscrita cuyo significado literal es círculo, es una representación simbólica y arquetípica del universo según la antigua cosmología budista. Está constituida por un conjunto de figuras y formas geométricas concéntricas; representa las características más importantes del universo y de sus contenidos. Su principal objetivo es fomentar la concentración de la energía en un solo punto durante la meditación.

Los mandalas son utilizados desde tiempos remotos. Tienen su origen ancestral en la India (imágenes y meditaciones budistas) pero pronto se propagaron en las culturas orientales, en los indígenas de América y en los aborígenes de Australia. La mayoría de las culturas poseen configuraciones mandálicas, frecuentemente con intención espiritual: la “mandorla” –almendra- del arte cristiano medieval; ciertos “laberintos” en el pavimento de las iglesias góticas, los rosetones de vitral de las mismas iglesias góticas…

En la cultura occidental, fue Carl G. Jüng (1875-1961) quien los utilizó en terapias con el objetivo de alcanzar la búsqueda de individualidad en los seres humanos. Jüng solía interpretar sus sueños dibujando un mandala diariamente, en esta actividad descubrió la relación que éstos tenían con su centro y a partir de allí elaboró una teoría sobre la estructura de la psique humana.


Según Carl Jüng, “los mandalas representan la totalidad de la mente, abarcando tanto el consciente como el inconsciente”. Afirmó que el arquetipo de estos dibujos se encuentra firmemente anclado en el subconsciente colectivo.

Para Jüng “el mandala es una forma arquetípica”, de ahí que aparezca en diferentes culturas lejanas entre sí, considera que la comprensión del arquetipo puede resultar curativa.



Justificación Psicoevolutiva

Siguiendo a Piaget, Wallon y Erikson, entre otros, el niño pasa por varios estadios de desarrollo hasta convertirse en adolescente y finalmente adulto. No hay homogeneidad en las clasificaciones, pero si en la denominación de tres fases de desarrollo: infancia, niñez, adolescencia. Son tres tipos de inteligencia distintas, tres maneras de abordar la realidad.

Para Jean Piaget (1896-1980), prestigioso psicólogo conductista,  todo el desarrollo de la inteligencia está en un proceso de estimulación entre los dos aspectos de la adaptación al medio, la asimilación y acomodación. Cuando un niño nace, dispone de una capacidad de desarrollo de potencial intelectual. El hecho de que pueda llegar más o menos lejos va a depender básicamente del esfuerzo que él haga, pero este esfuerzo va a estar condicionado por los estímulos que les ofrezca su entorno. La rapidez del avance, a través de los períodos de desarrollo de la inteligencia, está influida por el entorno sociocultural, aun cuando el orden de los estadios o fases permanezca inalterado. La mejor ayuda al desarrollo del niño es un medio ambiente que le estimule, que le resulte atractivo y gratificante.

Para  Henri Wallon (1879-1962),  psicólogo neoconductista y afamado neurólogo, la evolución es un proceso más discontinuo, con crisis y saltos apreciables, tiene un enfoque más pluridimensional. En la mayoría de los casos, la pintura puede tener un efecto preventivo, ya que por medio de ella los niños aumentan la conciencia de sí mismos y pueden superar las crisis de su desarrollo con mucha más facilidad.

Para Erik Erikson (1902-1994), psicoanalista norteamericano, el desarrollo se basa en los aspectos psicosociales del proceso evolutivo humano, la vida gira en torno a la persona y el medio. Cada etapa es avance o regresión de otras etapas.

Cuando hablamos de inteligencia hablamos también de creatividad infantil; en la escuela habrá que tener en cuenta que ésta se manifiesta y fomenta por medio de actividades expresivas, básicamente a través de la expresión dinámica (actividades lúdicas, el juego) y la expresión plástica (dibujo, pintura).

Sin descuidar la primera vamos a centrarnos en la segunda de las acepciones, introduciendo los mandalas como instrumento educativo para fomentar y desarrollar la creatividad en la escuela mediante el dibujo y la pintura, con un triple objetivo: Desarrollar los sentidos y la capacidad de percepción; fomentar la iniciativa personal, y estimular la imaginación favoreciendo la libre expresión.

Objetivos por ámbitos

En el ámbito cognoscitivo: Desarrollar la fluidez, flexibilidad y originalidad en las ideas del niño.

En el ámbito afectivo y social: Desarrollar actitudes creativas frente a distintas situaciones que se le presenten.

En el ámbito psicomotor: Favorecer que el niño se exprese de forma creativa con el uso de distintas técnicas plásticas.

Vamos a centrarnos en aquellos aspectos de desarrollo que más nos interesan para introducir el tema de los mandalas a nivel   psicopedagógico y didáctico. No importa el enfoque psicoevolutivo que sigamos, todos ello coinciden en que el éxito de la educación se logra cuando los niños se encuentran capacitados para enfocar la vida por sí mismos.

Ya desde el primer ciclo de Primaria comienzan a mostrarse la adquisición y desarrollo de algunas destrezas  en el niño. Las habilidades psicomotoras van aumentando hasta fines de la adolescencia (utilizar lápiz, escribir en pizarra, pintar dibujos, hacer dibujos, emplear instrumentos, juegos y deportes, bailes…). Además “el desarrollo de la creatividad debe de ir parejo al de la inteligencia” (Guilford, 1950). Se han podido establecer altas correlaciones entre creatividad e inteligencia. La educación ha de contribuir al desarrollo de la creatividad a través del lenguaje, el juego y la libre expresión creativa de los trabajos escolares para el desarrollo cognitivo y social más pleno.

Teniendo en cuenta todo lo anteriormente expuesto, la introducción de los mandalas en la Escuela deberá hacerse no sólo desde el área de Educación Plástica, sino como forma de expresión entroncada en todo el Currículo oficial de la  Educación Primaria.

Los mandalas ayudarán a la formación de la inteligencia, del razonamiento, del control y dominio del cuerpo, todo ello desde un prisma de predominio del pensamiento divergente o creativo.

1. Mandalas infantiles como estímulo al aprendizaje.
Todo es posible si el niño tiene estímulos. O. K. Moore ha demostrado que cualquier niño es capaz de alcanzar un nivel de rendimiento notable que sólo es posible si al niño se le confronta con los estímulos necesarios. Los MANDALAS suponen un estímulo motivador para cualquier aprendizaje de las distintas áreas del Currículo de Educación Primaria.
2. Mandalas infantiles como medio de expresión.
A través del dibujo, del color, el niño  se expresa. Expresa su mundo interior, pensamientos, ideas, estados de ánimo y relaciones con el mundo de un modo cada vez más complejo, desde los primeros garabatos a las creaciones artísticas más abstractas y elaboradas desarrollando con ello su psicomotricidad. Algunos autores actuales como Stern, Lowenfeld o Arheim han estudiado las formas de expresión del niño a través de la Expresión Plástica, afirmando su estrecha relación con el desarrollo integral del niño.

3. Mandalas infantiles como medio de comunicación.
El niño utiliza los recursos de la Expresión Plástica para desarrollar procesos de comunicación, tanto más ricos cuanto más lo sea el medio y los recursos que le estimulen y le orienten. A través de formas y colores utilizados con una u otra intención el niño busca comunicarse con los demás, comunicar su interpretación de la realidad, proyectar sus impresiones. A través de las imágenes de sus dibujos, de las producciones de sus pinturas, el niño intenta comunicar a sus interlocutores la realidad de un mundo interno que necesita compartir con los demás.

4. Mandalas infantiles como medio de producción.
Desde los garabatos, los remolinos, esferas a las producciones de mandalas más elaboradas, el niño va evolucionando en su creatividad productiva y habilidad psicomotriz.
En un análisis de la producción gráfica, Arnheim observa que los ángulos sustituyen a curvas, la continuidad a la discontinuidad, comenzando por el uso de figuras esféricas para pasar después a trazos rectos.

La producción plástica deberá ser tenida en cuenta como una faceta importante del desarrollo integral del niño en todas las edades.

5. Mandalas infantiles como técnica de relajación.

Un adulto ante un problema puede verbalizarlo expresando así sus sentimientos. Un niño se relajará  utilizando un tipo de expresión no verbal ya que no saben expresar con palabras sus sentimientos, puede entonces usar otro medio que no sean las palabras.
La actividad creativa de los mandalas en estos de niños tensos, introvertidos y con tendencia al aislamiento es muy útil.

Tradicionalmente la educación es analítica, todo tiene una relación de causa a efecto, los procesos siguen una lógica definida. Con ello se trabaja casi en exclusiva el hemisferio cerebral izquierdo que procesa la información verbal, que codifica y decodifica el habla.

Se ha dado muy poca importancia al hemisferio cerebral derecho que se dedica a la síntesis, combina las partes para formar un todo. La expresión en este hemisferio no es verbal, es por imágenes. Actualmente se dedica más tiempo a la expresión plástica, a la creatividad y a la expresión artística .Trabajar la educación artística de forma sistemática es abrir al niño a un mundo en que la fantasía y la percepción multisensorial  serán para él nuevas posibilidades de enriquecimiento y de expresión.

Aprender a percibir la belleza es fundamental ya que estimula el desarrollo integral de las capacidades humanas, que muchas veces quedan limitadas a lo estrictamente analítico.
Las técnicas de relajación son un medio indispensable de educación que lleva progresivamente al dominio de los movimientos y, como consecuencia, a la disponibilidad del ser entero.

6. Mandalas infantiles como medio de superación de situaciones emocionales negativas (fobias, ansiedad, temores nocturnos, acosos escolares, experiencias traumáticas).

Mientras se pinta en el subconsciente desaparecen los problemas porque nos encontramos en un estado de total relajación y concentración. Las respuestas de reacción a estados emocionales negativos van desapareciendo y poco a poco se transforman. Para el niño pintar o crear mandalas  puede ser un medio de autoterapia.

Por todo lo anteriormente expuesto, como docentes consideramos que no se debe desdeñar la importancia de los mandalas como un instrumento educativo más de importante valor psicopedagógico. Recomendamos la práctica en las escuelas, a todos los niveles y desde todas las áreas; en un mundo como el nuestro cada vez más carente de valores no está de más ayudar a que nuestros alumnos descubran su mundo interior y canalicen de forma positiva sus energías.

Algunos modelos de mandalas sencillos:







domingo, 26 de junio de 2016

programación pastoral

Programación pastoralDPE
 
SUMARIO: 1. Punto de partida. - 2. ¿Por qué es necesario programar? - 3. Hacia una definición de programación. - 4. Concretando aún más: ¿Qué instancias se ven implicadas en una programación? - 5. ¿Qué implica una recta programación? - 6. Criterios básicos para programar.

1. Punto de partida
La programación pastoral es un termómetro para valorar el talante pastoral de una parroquia, de un arciprestazgo, de un movimiento, de una comunidad, e incluso de una Diócesis.
La programación es una herramienta, "un proyecto evangelizador de futuro, en el que se fijan y coordinan objetivos y acciones"; es un ejercicio necesario de prospección para prever el futuro de nuestra Iglesia (favoreciendo la acción del Espíritu Santo).
2. ¿Por qué es necesario programar?
- Para hacer posible la Iglesia de comunión y corresponsabilidad. "Dime cómo programas y te diré qué modelo de Iglesia estás haciendo".
- Desclericalizar la Iglesia y evitar "personalismos" o "reinos particulares".
- Para abrirnos a otras personas y comunidades.
- Reconocer y potenciar los carismas del Espíritu.
- Coordinar fuerzas para evangelizar en una sociedad que ya no piensa en cristiano, ya no siente en cristiano, ni actúa en cristiano.
- Potenciar los equipos de trabajo y vida.
- Crear mentalidad de Iglesia diocesana y de pastoral de conjunto.
- Es un signo de los tiempos: se programan las personas en un proyecto de vida, las familias, las empresas, los partidos, la sociedad...
-  Es la forma de ser efectivos y honrados, de respetarnos como personas y respetar a los demás, y de potenciar una colaboración seria y generosa.
- Es copiar la "pedagogía de Dios", que también ha "programado" su historia de Salvación: Creación, Antiguo Testamento, Nuevo Testamento...
- Sólo la comunidad que programa:
  • sabe lo que es,
  • sabe dónde está,
  • sabe dónde quiere ir,
  • sabe cómo seguir caminando,
     
  • es consciente de sus límites y virtudes,
  • se sabe lo penúltimo, al servicio y como mediación del Espíritu Santo y de los hombres.
Gracias a la programación se equilibran las cuatro dimensiones que hacen una Iglesia particular: Comunión, Liturgia, Evangelización, Diakonía.
Gracias a la programación se equilibran también las cuatro dimensiones para un sano crecimiento de las personas y comunidades:
- Inserción eclesial (vivencia comunitaria).
- Anuncio del Evangelio (descubrimiento del mensaje).
- Personalización de la fe (conversión).
- Compromiso eclesial y social (vivencia de carismas y ministerios).
La programación es necesaria, al menos por estas razones:
  • Honestidad: ni me puedo quemar, ni debo quemar a los demás o jugar con ellos. Programar es creer en los demás y en sus cualidades y valores.
  • Modelo de Iglesia: Dime cómo programas y te diré en qué Iglesia crees.
  • Termómetro para determinar la vitalidad de una comunidad: son imprescindibles los consejos.
  • Obediencia al Espíritu Santo: "Si el Espíritu dicen que es una paloma, necesita al menos pistas de aterrizaje".
El espíritu teologal de la programación es éste: "Forma parte de la caridad hecha amor y servicio creativo, discernido, metódico y eficaz".
No es lo mismo planificación que programación. La planificación es la determinación de los grandes valores. La programación, la concreción de esos mismos valores, aquí y ahora.
Es necesario programar porque es necesario soñar. Dios ha colocado siempre a sus amigos ante utopías imposibles (Abraham, Moisés, Profetas, Pablo...).
La programación es la obediencia a la verdad (1 Pe 1,22). La no dispersión de energías porque tenemos pocas y necesitamos concentrarlas en el único posible (es la definición de paciencia que da Tomás de Aquino). Programar es realizar el hoy de Dios, liberándonos de la esclavitud del pasado y de la opresión del presente, abriendo futuro.
3. Hacia una definición de programación
Una primera definición funcional de programación sería ésta:
Determinar el mejor camino desde el dónde estamos y hacia dónde queremos llegar, teniendo en cuenta: a) los condicionantes y las circunstancias del punto de partida (recursos, obstáculos, potencialidades) y b) las exigencias del ideal.
Existen dos modelos complementarios de programación:
  1. De demandas y necesidades (se parte de la realidad).
  2. De prospectivas (se parte del ideal que se quiere conseguir).
Desde lo afirmado, se pueden ya, ofrecer dos definiciones de programación:
  1. Selección de objetivos y acciones dosificados, progresivos, coordinados y evaluados que hacen que la Iglesia particular (o parroquia o arciprestazgo) sea lo que tenga que ser y dé respuesta evangelizadora en cada momento histórico, implicando a todos los agentes de pastoral y comunidades.
  2. Proceso orgánico de comunión eclesial que lleva a la Iglesia particular a buscar los objetivos y acciones y a potenciar los recursos humanos y materiales más adecuados en orden a hacer posible la comunión intraeclesial y la evangelización del entorno social en el que vive.
Insistimos: con la programación se quiere evitar una comunidad piramidal o sólo de sectores, o sólo de grupos con cierta relación de afinidad y relación entre ellos, o sólo de comunidades independientes, y hacer posible una comunidad de comunidades corresponsable y evangelizadora.
Toda programación debe responder a estas preguntas: por qué (objetivos): situación necesidades, ideario, objetivos acciones anteriores; qué (acciones); cómo (medios): recursos y actividades; cuándo (tiempos); dónde y para quién (lugar y destinatarios); quiénes (responsables).
En toda programación se dan "niveles" o instancias: todo el pueblo de Dios; parroquias e institutos; movimientos y comunidades de base; sectores: compromiso, comunión, liturgia, kerigma.
¿Qué agentes deben programar? -Todos, en diversos estamentos y comunidades de referencia.
¿Qué pasos se dan en una programación? -Revisión de lo andado y análisis de la situación; elaboración técnica de objetivos y acciones; comunicación a todo el pueblo; realización; revisión.
¿Cuáles son las exigencias de toda programación? -Que mejore el punto de partida (que sea alternativa); que responda a lo que viene de la realidad (signos de los tiempos) "no se puede remar contra los signos de los tiempos": libertad, dignidad, igualdad, corresponsabilidad, participación, etc.; que parta de las comunidades parroquiales y arciprestales. Se definen como ámbito en el que la totalidad de la oferta de salvación se encuentra con la cotidianeidad de la vida de todos los hombres. Siempre abiertos a lo diocesano.
En resumen, con la programación se quieren evitar los vicios del individualismo y personalismo, del ir por libre o como francotiradores, de la improvisación o de la rutina. Se busca desarrollar la comunión, la corresponsabilidad, el compromiso que implique a todos, el saber trabajar con constancia y paciencia, el trabajo en equipo, la ayuda y la fraternidad.
4. Concretando aún más: ¿Qué instancias se ven implicadas en una programación?
La parroquia, arciprestazgo, organismos diocesanos y la propia diócesis.
La parroquia como unidad primaria de atención y acción pastoral.
El arciprestazgo como unidad básica de atención y acción pastoral de conjunto.
Las delegaciones diocesanas, como entidades diocesanas de apoyo a las comunidades parroquiales y a los arciprestazgos.
Toda la diócesis, a través de los planes diocesanos de pastoral, propuestos principalmente por el Consejo Pastoral Diocesano y sancionados por el ordinario.
Y, tanto en las parroquias, como en los arciprestazgos, como en la diócesis, cobran protagonismo especial los consejos de pastoral. Advertimos de un círculo vicioso: no se cree en la programación porque no se cree en los consejos; donde hay consejos, es necesario y obligado programar.
5. ¿Qué implica una recta programación?
Una acertada programación implica:
  • Clara conciencia eclesial diocesana.
  • Valentía profética: no se programa sólo desde lo que hay (punto de partida) sino para y hacia dónde se quiere llegar (punto de llegada).
  • Realismo (se parte de necesidades sentidas).
     
  • Totalidad: Todos implicados y todos necesarios.
  • Flexibilidad y metodología realista: No todo de golpe, por etapas.
  • Renovación en los agentes de pastoral: de mentalidad, de sensibilidad comunitaria, de seriedad en el trabajo y capacidad de autocrítica y revisión, de coordinación incansable, de humor-amor-paciencia.
     
  • Es un ejercicio de participación y responsabilidad.
6. Criterios básicos para programar
1. Análisis de realidad y selección de objetivos: Pocos y que sean fundamentales y englobantes. Desde la revisión de los anteriores. Desde aquello a lo que se quiere dar prioridad. De acuerdo al Evangelio y a lo que la Iglesia pide hoy. Conociendo la realidad eclesial y social (necesidades sentidas). Atendiendo esas demandas en las cuatro dimensiones de la Iglesia. Potenciando nuevas ofertas, particularmente a los más alejados.
2. En la selección de acciones: Pocas y derivadas de los objetivos. Que sean realizables y no sólo utópicas o como declaración de buenas intenciones. Sentidas, entendidas y asumidas por los interesados.
3. En la forma de llevarse adelante: fijar muy bien los destinatarios, los medios, los responsables, los tiempos, la revisión (evaluación).
4. En la evaluación: criterio realista: una cosa es lo que se quiere; otra, lo que es; y otra, lo que se puede hacer. Criterio eclesial: de fidelidad al Espíritu y a la Iglesia. Criterio de continuidad: lejos de desanimarnos, debe estimularnos a seguir caminando.
5. Hacer un informe periódico por escrito. Para sacar al menos esta conclusión: "Hemos hecho poco, pero merece la pena volver a intentarlo y seguir en esta línea".
En orden a una pastoral de conjunto diocesana, lo anteriormente expuesto es urgente, en las dimensiones que abarca, para los arciprestazgos. Que no se conciben, como queda dicho, como un ente superior o superpuesto a la Parroquia, sino como la continuidad natural de la misma, para potenciar sus diversas dimensiones.
Desde el Derecho Canónico se pide, e insistimos en ello, que el arciprestazgo fomente y coordine acciones comunes y facilite la tarea pastoral de las parroquias.
Para no quedarnos en declaraciones de buenas intenciones, es muy importante, insistimos en ello, la creación y buen funcionamiento de los consejos parroquiales y del Consejo Arciprestal.


BIBL. — R. BERZOSA MARTÍNEZ, Para comprender y vivir la Iglesia Diocesana, Burgos 1998.

criteriología pastoral


"SÍNTESIS DE CRITERIOS PASTORALES A UN NIVEL TEOLÓGICO SERIO Y ABIERTOS A UNA IGLESIA MISIONERA".

CRITERIOLOGÍA DE LA ACCIÓN PASTORAL

I. PRINCIPIO DE LA ACCIÓN PASTORAL

1.  PRINCIPIO TEOCÉNTRICO. - El primer presupuesto de cualquier acción pastoral consiste en:

EXAMINAR el lugar que ocupa Dios. La acción pastoral de la Iglesia tiene su origen en la DECISIÓN LIBRE DEL PADRE, que nos eligió antes de la creación del mundo y nos predestinó a la adopción de hijos. (Ef 1,4-5.10).

LA CONSTRUCCIÓN SOBRE LA IGLESIA, "decretó elevar a los hombres a la participación de la vida divina, a raíz del pecado de Adán, no lo abandonó sino dispensó en auxilio para la salvación en atención a Cristo Redentor. Y determinó CONVOCAR a los creyentes en Cristo en la gaita Iglesia".

EL VATICANO II, habla de los designios de Dios que son abundantes y constituyen los designios primeros de la acción pastoral. "Si El no hubiese manifestado su PLAN, no podríamos trazar ninguna PLANIFICACIÓN PASTORAL, más aun lo ordena, dirige y gobierna el mundo y los caminos de la comunidad cristiana, con sabiduría y amor."

La Teología pastoral nace al final del s. XVIII, con una orientación ANTROPOCÉNTRICA UNILATERAL por influjo de la filosofía de su tiempo. El verdadero carácter TEOCÉNTRICO DE LA PASTORAL de J. M. SAILER y J. B. HIRSCHER con el paso de la filosofía a la religión y la escolástica al evangelio. Pusieron ambos de relieve el aspecto divino del hecho religioso frente al peligroso ANTROPOMORFISMO de AUFKLÄRUNG. La concepción pastoral avanza con lentitud por salir del NATURALISMO, orientándose hacia la REVELACIÓN.

La ACCIÓN PASTORAL DE LA IGLESIA tiene que huir del PELAGIANISMO al ACENTUAR LA PRIORIDAD DE DIOS, en cuya acción colabora el hombre en la historia.

LA RELIGIÓN CRISTIANA no consiste en un ascenso del hombre hacia Dios, como lo propugnan las religiones ascéticas, sino en el descenso de Dios al hombre, ya que es una RELIGIÓN MISTÉRICA. En la acción pascual de Dios a través de Cristo.

Es fundamental el concepto de Dios en todo pensamiento y obra pastoral

2.- PRINCIPIO CRISTOLÓGICO
.- "El verbo de Dios por quien fue hecho, se encarnó, Hombre perfecto para salvar a todos. El es el fin de la historia humana."
JESUCRISTO, verdadero Dios y verdadero hombre, prototipo de toda mediación cristiana. "Su humanidad unida a la persona del Verbo es instrumento de salvación." Toda acción pastoral por ser cristiana, tiene que ser  TEÁNDRICA, es decir DIVINO - HUMANA. El quehacer pastoral se debe dar como una SIMBIOSIS entre la participación de Dios y del hombre, cuyo modelo reside en Cristo mediador. Si cortamos la intervención de Dios en Cristo, llegamos a un PELAGIANISMO PASTORAL; pero si prescindimos del ACTO PERSONAL HUMANO, nos encontramos con un DOCETISMO APOSTÓLICO.

El principio CRISTOLÓGICO nos muestra la perfecta colaboración TEÁNDRICA O SINERGIA entre el obrar de Dios y el obrar del hombre. JESUCRISTO ES EL COLABORADOR PERFECTO DE Dios. La acción de la Iglesia deberá contemplarse siempre a la luz de la acción pascual de Cristo. Nos ayudará rechazar la tentación del "MILAGRISMO", Dios acepta el ministerio de la Iglesia, divino - humano, como aceptó el servicio TEÁNDRICO de Jesucristo.

3.- PRINCIPIO PNEUMATOLÓGICO.
- La acción pascual del Señor, fruto histórico de los designios del Padre, por el Espíritu donde los últimos tiempos que "ya" han comenzado. El Espíritu es el dador de vida y el crecimiento del pueblo de Dios simbolizado por el VIENTO, SOPLO, ALIENTO A LA VIDA HUMANA, EMBAJADOR de un mundo definitivo; conjuntamente con el juicio de Dios, cumplido plenamente en Cristo cabeza. El Espíritu es el fundamento del nuevo pueblo. Y conserva una cierta libertad o autonomía dentro de la vida de la Iglesia. Guía la Iglesia a toda verdad (cf. Jn. 16,13), unifica la comunión y ministerio; provee y gobierna con diversos dones jerárquicos y carismáticos y embellece con sus frutos.

CONGAR la resume: "Cristo es la causa eficiente fontal, de la misión del Espíritu como la de los apóstoles. La causa final de esta doble misión continúa la obra de Cristo estableciendo la Iglesia, el Espíritu y los apóstoles son causa inmediata eficiente pero ambas viven y trabajan, los apóstoles son causa FORMAL, forman parte de la institución, no sólo son los que edifican la casa de Dios - causa inmediata (1 Co 3,9-17) sino las mismas piedras del edificio - causa formal (Ef 2.20).

4.-PRINCIPIO ECLESIOLÓGICO.
- La teología pastoral presupone un conocimiento esencial de la Iglesia y un ANÁLISIS TEOLÓGICO DE LA SITUACIÓN ACTUAL
-Ni se puede JUZGAR EL PRESENTE (porque es) y NORMATIVIZAR EL FUTURO (lo que debe ser).

La comunidad cristiana primitiva reconoció ECCLESIA PUEBLO DE DIOS en analogía con la SINAGOGA JUDÍA, no con la POLIS GRIEGA ROMANA. Los cristianos se reúnen para OÍR lo que Dios dice, no para decir o decidir sin presupuestos divinos previos. Usan tres vocablos: IGLESIA TOTAL, COMUNIDAD LOCAL Y ASAMBLEA CULTUAL. Se le  denomina PUEBLO DE DIOS. Comunidad cristiana como CUERPO DE CRISTO Y TEMPLO DEL ESPÍRITU SANTO. San Cipriano afirma: Toda Iglesia es una muchedumbre reunida por la unidad del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo"

Al verdadero concepto ECLESIOLÓGICO ACTUAL deberá ajustarse a nuestra pastoral. TEOLÓGICAMENTE K. RAHNER afirma: la Iglesia es la comunidad socialmente constituida por la FE, ESPERANZA Y CARIDAD que se actualiza en Cristo en el mundo, como realidad y verdad plena de la revelación ESCATOLÓGICA de Dios.

La Iglesia es el pueblo de Dios que vive del cuerpo de Cristo y en la celebración eucarística se hace cuerpo de Cristo Visibilidad del SACRAMENTO. Su principio no es la SANGRE, sino la FE (bautismo); su existencia reside en una ENTREGA (AGAPÉ, MARTYRIUM), acto de entrega de Cristo (eucaristía). Existe correspondencia entre JERARQUÍA- SACRAMENTO y jurisdicción -orden, Pero el centro de la Iglesia no es el CRISTO HISTÓRICO sino el CRISTO PASCUAL que habla en el ESPÍRITU.

5.- PRINCIPIO HISTÓRICO SALVÍFICO.
- El N.T. no habla de HISTORIA DE SALVACIÓN sino de "OIKONOMIA", presenta unos sucesos salvadores donde Dios interviene en la HISTORIA

Algunos exégetas cómo CULLMAN, afirman que entre la historia de salvación, constituida por sucesos salvadores de los KAIROI SAGRADOS o instantes cruciales, e historia profana, constituida por hechos históricos humanos, no hay identidad sino analogía.

Hoy se tiende, después de la Pacem in terris, de Juan XXIII y Vaticano II, a considerar la historia GLOBAL.

Pablo VI decía (Sept. 1966) a los teólogos reunidos en Roma: "El concilio exhorta a los teólogos a que elaboren  una teología que sea a la vez pastoral y científica; que se mantenga en estrecho contacto con las FUENTES PATRÍSTICAS, HISTÓRICAS Y ESPECIALMENTE BÍBLICAS, que se respete la autoridad docente de la Iglesia y en particular al vicario de Cristo, relacionada con la humanidad según ésta es vivida en la actualidad histórica concreta.

La historia de salvación hay que relacionarla totalmente con la historia actual. Iluminar evangélicamente todos los acontecimientos, supone la visión el don del Espíritu de la Sabiduría, así son más profundos, más evangelizados y catequizados.


RECOMENDACIONES

A partir de los principios de la acción pastoral se recomienda observar los siguientes pincipios:
1. Para el principio TEOCÉNTRICO, al ser aplicado la acción pastoral en la Iglesia contar con el DISCERNIMIENTO.
2. Para el principio TEÁNDRICO O CRISTOCÉNTRICO, su APLICACIÓN en la Iglesia (visible).
3. Para el principio PNEUMATOLÓGICO, que se alimente de  LITURGIA, FUENTES PATRÍSTICAS, SAGRADA ESCRITURA.
4. Para el principio ECLESIOLÓGICO, se PERPETUA en EL MISTERIO DE CRISTO.

5. Para el principio HISTÓRICO SALVÍFICO, que se ACTUALIZA en la historia concreta viviendo.